Seguimos en el mes de febrero y teníamos que hablar sobre la uva Syrah – también conocida como Shiraz – en esta ocasión repasaremos un poco de su historia, surgimiento y cómo es reconocida actualmente en el panorama de los sommeliers.

Originaria de Francia, se ubica en la parte central del país, específicamente el norte del Valle del Ródano, donde goza de un gran reconocimiento. Esta uva tinta posee una piel gruesa y por lo general produce vinos muy oscuros y tánicos, razón por la que continuamente se mezcla con uvas más suaves.

Los aromas que suele recordar son sinónimo de las frutas negras: zarzamoras, cerezas negras y ciruelas negras, además de pimienta negra molida, jengibre, chocolate oscuro y un pequeño toque de violetas.

El cultivo de la uva Syrah ha sido un éxito en otros países, como Australia, Sudáfrica, Chile, Argentina, Uruguay, y por supuesto, México donde la encontramos en los Valles de Ensenada en Baja California, Querétaro, Aguascalientes y Coahuila.

Algunas características importantes sobre la uva Syrah:

– Es la tercera uva más cultivada en Francia y también en la elaboración de vinos.

– Se adapta a dos tipos de clima: el mediterráneo y zonas cálidas donde genera vinos más abocados y frutales.

– La Syrah produce vinos muy oscuros, con mucho cuerpo, potentes, alcohólicos y con gran capacidad de guarda, aunque suelen madurar relativamente pronto.

– Se recomienda consumir los vinos en una temperatura de 14ºC cuando son jóvenes y a 18ºC en caso de que sean más complejos.

Ahora ya tienes una pequeña introducción al mundo de la uva Syrah. Nunca es tarde para recordar que cada vino tiene un trasfondo enorme y que se debe valorar de gran manera el cultivo de las uvas y el cuidado de las mismas.

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